Siempre sabrás algo que puede ayudar a otro ¿Qué esperas para compartirlo?

¿Qué esperas para compartirlo?

Portada del pódcast Hombre Plus
Hombre Plus
¿Qué esperas para compartirlo?
Loading
/

Siempre sabrás algo que puede ayudar a otro ¿Qué esperas para compartirlo?

Puede que lo sepas, porque te lo he dicho en algún episodio; yo esperé mucho tiempo para compartirte mi mensaje… Porque sentía que no tenía nada que aportar: llámalo miedo al escrutinio, a los juicios, a las creencias limitantes mías y de los demás.

Le tenía terror a los comentarios negativos, o a que alguien me dijera —perdona la palabra— ¿quién coño eres tú para hablarme de esto? Superarlo, me costó un autolavado de cerebro en el que desaproveché varios años, por mi experiencia te digo:

No desperdicies tiempo que puedes invertir mejor equivocándote rápido y sin dolor.

¿Y por qué equivocándote?, porque si te centras en no meter la pata; nunca comenzarás y créeme allá afuera siempre habrá a quien le guste tu voz.

Partiendo de que quieres ayudar y antes de recoger tienes que sembrar; te traigo estas tareas indispensables para estructurar lo que será el aporte de tu marca personal…

3 deberes para contribuir como un hombre prémium

  1. Investigar
  2. Asimilar
  3. Orientar

Investigar

¿Crees que no tienes nada valioso para compartir?, eso cambiará preguntándote:

  • ¿Cuáles son los errores y aciertos que has cometido los últimos cinco años?
  • ¿Cuáles son los conocimientos técnicos y experiencias personales de ese mismo periodo?
  • ¿En qué etapa y superando qué dificultad te encontrabas entonces?

Lista tus respuestas en orden cronológico, y amplia los tiempos de acuerdo con tu experiencia, es decir, si tienes más de diez años en un campo especifícalo y así mismo la cantidad de hitos relevantes por año.

Asimilar

Ya con tu historial de errores, aciertos y conocimientos, pregúntate ¿Qué te hubiera gustado saber en cada una de esas etapas?

  • ¿Qué mensaje hubieras acatado?, ¿cómo te lo tendrían que haber dicho para que prestaras atención?
  • ¿Qué tipo de ayuda te hubiera gustado recibir? (sobre todo en los momentos más difíciles)
  • ¿A qué tipo de persona hubieras escuchado?, ¿eres ese tipo de persona?

También puedes consultar individuos que se encuentren pasando por las mismas que tú pasaste, eso puede complementar tu mensaje.

Orientar

Antes de ayudar cambia de mentalidad, cuando te desprendes más aprendes para guiar, suelta primero las creencias que te atan:

Arriésgate a mostrarte vulnerable, al final será un ingrediente indispensable para humanizar tu marca personal y enseñar a otros lo que sabes.

¿No tienes energía para entrenar en el gym?, come bien, así mismo, si te sientes ignorante para compartir; alimenta tu mente con contenido cargado de poder.

El miedo a exponerte nunca se irá, debes aprender a gestionarlo, es más, tampoco es bueno que estés confiado, porque no será un reto y te aburrirás, además si no sientes que algo te falta no seguirás creciendo.

¿Qué puedes hacer ahora?

  1. Sin errores no eres un hombre real y nadie te creerá desde la perfección; no te cierres a contar tus caídas, al evitarle a otros tus fallas serás útil y eso se te devolverá.
  2. Busca una conexión con tus similares en etapas anteriores, cuando sientas que tus experiencias no ayudan es porque estás centrando el mensaje en personas más adelantadas que tú.
  3. Y por último, estudia constantemente, ¡todo cambia y evoluciona!, lo que sabes ahora probablemente en unos años estará caduco.

No se te olvide:

Siempre sabrás algo que puede ayudar a otro ¿Qué esperas para compartirlo?

RENZO D’ANGELO

¡Hasta la próxima!


Avatar de Renzo

Renzo D’Angelo

2 respuestas a «¿Qué esperas para compartirlo?»

  1. Avatar de RodriGO
    RodriGO

    Wow!!! escucharte es un NUEVO IMPULSO a atreverse. ¡Vamos! Renzo, gracias por compartir.

    1. Avatar de Renzo

      ¡Hey RodriGO!, qué bueno verte por aquí, espero que te atrevas muy pronto, un abrazo ,)

Coméntame

Clan de hombres disruptivos

Únete, y recibe mi correo semanal para impulsar tu marca personal masculina como un hombre prémium.