Sueña, intenta, falla, acierta, aprende y repite ¡Nunca pierdas la ilusión!
No es casualidad que haya elegido esta máxima para celebrar el episodio número 100 del pódcast y ya verás porqué.
Para subir tu nivel (en cualquier aspecto), dependes de cuestionamientos básicos; en dónde estás ahora, a dónde quieres llegar y qué estás dispuesto a hacer para conseguirlo.
Hasta aquí nada especial. Más que comprometerte con el resultado; debes ser ‘patria o muerte’ con el proceso (esto muchos se lo quieren saltar)
¿Y no sé por qué?, pareciera que hay algo por allí en nuestra sangre latina que nos impide enamorarnos del recorrido y solo nos volvemos fanáticos del resultado y sus beneficios por supuesto.
Y entonces, solo consigues ser un hombre ordinario, que como siempre te lo digo, ¡no es que esté mal!, siempre y cuando estés satisfecho con lo que eres y serás.
De lo contrario, pierdes el tiempo lamentándote y quejándote sin accionar.
Por eso, quiero que veas el proceso como el sistema que te permitirá alcanzar lo que te propongas con:
3 energizantes para mantenerte animado como un hombre prémium
- Minucia
- Desafío
- Repetición
Minucia
Esta es la clave de los pequeños pasos y sus recompensas. Para agregar este energizante a tu sistema solo debes desfragmentar tu objetivo, en meses, semanas, días e incluso horas.
Luego programar su ejecución y cumplir más de un ochenta por ciento de las veces. Por ejemplo, todos los martes a las catorce horas es la cita contigo mismo para ejecutar la actividad.
Los pequeños pasos parecen inofensivos en tu sistema, sin embargo, son los potenciadores de tu presente y los determinantes de tu futuro.
Desafío
Mantenerte constante en un recorrido, sobre todo cuando necesitas meses o años para conseguir lo que te hayas trazado, está relacionado con dosificar la complejidad de la actividad, ¿qué te quiero decir?
Fíjate cuando comienzas un proyecto que te acerca a lo que quieres lograr, ¡te sietes animado! Y aquí te aclaro, tu meta puede no tener un punto de llegada; un hábito por ejemplo, hacer ejercicios, hacer un pódcast, tu marca personal, en fin.
Siempre que represente un reto alcanzable para ti; te animará. Si es demasiado complejo; te frustrarás (requiere minucia) y si es muy fácil te aburrirás y también lo abandonarás, ¿me hago entender?
Repetición
Dale y dale hasta que hagas la actividad constantemente (un hábito), que no tengas que pensar siquiera en hacerlo (como cepillarte los dientes).
Luego súbele la calidad o la intensidad hasta que comience a aburrirte y en ese preciso punto le subes el nivel nuevamente y vuelves con los energizantes anteriores (minucia y desafío).
Así funciona la repetición, el quid está en subir la complejidad en la medida que te vas acercando a tu nivel: agrega una función más, borra todo y mejóralo, actualiza las herramientas involucradas, ¿qué sé yo?
Lo que te haga mantener el entusiasmo, por eso es importante comenzar ya de a poco e ir avanzando.
¿Qué puedes hacer ya?
- Estructura la mínima expresión de la tarea que debes hacer con día y hora de ejecución en tu calendario
- Busca el punto medio de dificultad, que lo puedes alcanzar con incomodidad y ten claros los siguientes niveles
- Y por último, entiende que la esencia está el proceso, no el resultado en sí mismo, así que mete la pata, ejercita tu mente y vuélvelo a intentar. Así hago este pódcast y siendo el episodio 100 sé que te funcionará.
No se te olvide:
Sueña, intenta, falla, acierta, aprende y repite ¡Nunca pierdas la ilusión!
Renzo D’Angelo
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