Eliges dónde y con quién caminas. Eliges qué, para qué y para quién hacerlo.
Eliges tus pensamientos, pasiones, guerras y alegrías. Eliges tus enemigos y compañías. Y sobre todo; eliges cómo vivirlo.
Cuando te crees roto porque no puedes elegirlo; en realidad, elegiste no elegirlo en algún momento—o elegiste errado, y ya después sin opciones te creíste con menos por dimitirlo.
Yo elegí no estar aquí o allí—elegí aportar, elegí marcar una huella intencional en los pocos o muchos hombres de mi generación que pueda y se quieran ayudar, y elegí, en lugar de crecer, progresar.
Aunque, lo que elija yo, y lo que elijan los demás hombres es irrelevante, la cuestión es y será:
¿Qué elegiste tú?, ¿qué estás haciendo tú para conseguirlo?, y si no estás haciendo lo que eliges, ¿qué esperas para incomodarte, elegirlo y salir a vivirlo?
Porque recuerda, que al final; un hombre siempre elige.
Con este corto, abro la nueva temporada del pódcast, síguelo en Apple Podcasts para acceder, tanto al contenido nuevo, como a los episodios especiales anteriores.
Mantente atento, hazte presente y nos escuchamos en las siguientes entregas para destacar, simplificar y comerciar como un hombre prémium.
¡Hasta pronto!
Coméntame