Los hombres tememos a la escasez, sobre todo en nuestros negocios, pues la asociamos con problemas.
Sin embargo, la escasez no es el problema; la falta de opciones lo es. En realidad, la escasez es una construcción mental, y eres tú quien le da poder para limitarte o presentarte posibilidades que antes no veías.
Piensa en el montañismo. Te enfrentas a una cumbre imponente, con diversos caminos para llegar a la cima. Ahora, ¿qué pasa si solo te centras en una única ruta, en una estrategia predefinida? Estás limitando tus propias opciones y atrapándote en un camino que quizá no sea el más efectivo.
El mundo de los emprendimientos es como esa montaña: un desafío cambiante. Cada decisión que tomas puede abrir nuevas rutas y posibilidades.
Sin embargo, si te aferras a la mentalidad de escasez, te anclas en un único camino y te cierras a explorar nuevas oportunidades.
Imagina que quieres diversificar tus fuentes de ingresos con un negocio paralelo. Te entusiasma una tienda en línea de ropa interior masculina. Aunque, al revisar la gran variedad de opciones, de inmediato supones: Es un mercado saturado y seguramente no podré ser rentable allí. ¡Eso es mentalidad de escasez!
En el campo de la ropa interior masculina hay infinidad de nichos, desde bóxeres diseñados exclusivamente para hombres deportistas de mediana edad hasta interiores clásicos cómodos para climas cálidos. En todos habrá competencia, pero también habrá tipos insatisfechos esperando una nueva solución.
La cuestión aquí es, en lugar de centrarte en lo que ya está cubierto, ¿qué vacíos existen en ese mercado? ¿Qué tipo de hombres siguen insatisfechos con la ropa interior que encuentran? ¿Qué usarías tú o un tipo como tú?
No dejes que el miedo a la escasez limite tus oportunidades. La estrategia más fuerte es mantener tus opciones abiertas. Abunda la abundancia cuando dejas de competir y empiezas a ser un creador de alternativas.
Entonces, ¿qué puedes hacer para superar esta mentalidad y ser un hombre con opciones?
- Desafía la percepción de escasez. No des por hecho que el mercado está saturado. Haz tu propia investigación y busca nuevas oportunidades en nichos masculinos desatendidos o con productos demasiado generalizados.
- Sé flexible y dispuesto a adaptarte. El mundo de los negocios cambia constantemente. Si te apegas a una sola fuente de ingresos, te arriesgas a ser presa fácil ante lo inesperado.
- Adopta una mentalidad de creador, no de competidor. No se trata de ganar o perder, sino de crear algo valioso que otros hombres valoren y por el cual estén dispuestos a pagar más.
No permitas que el concepto de escasez te frene. Recuerda, eres un hombre de negocios, un líder, un conquistador de montañas. No estás en competencia con otros; estás originando tus propias condiciones.
La estrategia más fuerte es mantener tus opciones abiertas, desafiar las percepciones y adoptar la abundancia. La montaña es alta, pero hay más de un camino hacia la cima, y sobre todo, existen muchas más montañas.
Coméntame