
Acepta tu responsabilidad ¡Ejecuta en libertad!
Es fácil culpar a los demás de tu ineficiencia, y más aún, cuando crees que el mundo conspira para verte como un hombre fracasado.
Cuando vives en función de los demás y piensas que de alguien allá afuera dependen tus logros personales y profesionales, tu irresponsabilidad te hace preso.
Y no me digas que no te importa en absoluto lo que piensen otros de ti, porque es una frase cliché que todos dicen y pocos cumplen a cabalidad.
Si así fuera, no llevarías una vida «parecida» a la de muchos hombres de tu entorno, es más, no tendrías siquiera gustos iguales a otros.
Eso quiere decir, que abrazas la identidad colectiva, por una razón; ser aceptado por los demás.
Y actuar en función de ser aceptado, es no hacerte cargo de tus decisiones y acciones para culpar a los demás de tu rendimiento deficiente.
Si lo evalúas a fondo, nadie te roba tu productividad, en realidad, no hay verdaderos distractores sino más bien inconsciencia. Robar tu tiempo, es como quitarle el dulce a un niño, y peor sí está dormido.
Entonces, si en lugar de quejarte, te responsabilizas de tus malas decisiones (así como te atribuyes las buenas) podrás reinvertir el tiempo que pierdes en tareas que desemboquen en resultados favorables para tu desarrollo y marca personal.
2 pactos para accionar a tu modo como un hombre prémium
- Atención
- Progresión
Atención
Presta atención a lo que prestas atención. Recuerda que lo que no suma resta, y lo que no te acerca te aleja de tu misión imposible, entonces, ¿qué roba tu atención en este momento?, ¿en qué inviertes tu tiempo?
¿Atiendes temas, ideas, sucesos relevantes y positivos para tu mejoramiento?, o por el contrario, ¿vives sumergido en conflictos, problemas y acontecimientos fuera de tu control y dominio?
Progresión
Las metas y los objetivos son inútiles por sí mismos, no logras nada ni avanzas en absoluto teniendo claro lo que quieres per se. Porque los resultados se consiguen con sistemas, procesos y acciones que requieren un estilo de vida.
Y esos hábitos que debes construir para actuar bajo tus términos, no son objetivos, son trabajo duro y sudor que no incluyen resentimientos y horas perdidas en ocio que el marketing te hace creer que te mereces.
¿Qué puedes hacer ya?
- Analiza todo lo que «supuestamente roba tu tiempo» y sácalo de tu día, yo sé que suena fácil, sin embargo, si te responsabilizas, lo es. De tu atención dependen tu presente y futuro no renovables.
- Tener claro lo que quieres está bien, sin embargo, más importante es crear un sistema productivo que te ayude a conseguirlo, los objetivos no traen resultados, los buenos hábitos sí.
- Y por último, recuerda que todos aman la meta y pocos están dispuestos al proceso, por eso, hay tantos esclavos modernos, lo cual está genial, te será más fácil liberarte y destacar como un hombre prémium.
No se te olvide:
Acepta tu responsabilidad ¡Ejecuta en libertad!
Renzo D’Angelo
Deja un comentario