Sé más mortal e incorrecto ¡Lo bello es imperfecto!
La marca personal de un hombre prémium se trata «en parte», acerca de ser intencional y de cómo gestionar tu identidad para dejar la huella correcta en los demás.
Sin embargo, esa «conciencia» no implica que dicha huella sea perfecta. Y aunque todavía estés rodeado (para tu beneficio) de marcas personales y comerciales de plástico que yo llamo, no quiere decir que funcione, o por lo menos no eficientemente.
Además, cargar con el peso de comunicar lo que no eres tú o tu equipo «si es tu caso» es desgastante y al final no te permite crear un ambiente de confianza y menos ayudar a tu cliente genial.
Al igual que como consumidor no eres tonto, y te das cuenta cuando hablas con personas falsas y que buscan ser siempre «correctas».
Tu cliente también percibe ese halo de interés y sobreactuación para mostrar lo que eres o lo que vendes como algo maravilloso y sin errores. En otras palabras, se da cuenta cuando eres un hombre de plástico.
Ahora, que la mayoría no tenga ni idea de cómo gestionar su marca personal, ni cómo aprovecharla en la gestión de su negocio, para darle vida a la marca comercial o corporativa; te hace más fácil ser un hombre disruptivo.
¿Cómo?, presumiendo menos y ayudando más y sobre todo viendo la imperfección como algo natural que te suma en vez de restar, y para conseguirlo te traigo:
3 claves para conectar mejor con tu marca personal
- Seguridad
- Empatía
- Honestidad
Seguridad
Vuelve y juega; ser seguro no implica ser perfecto, a mí me gusta entenderlo más como ser arriesgado.
Si tienes la plena seguridad de que lo «correcto» «visto como lo común» no es la única solución, y siendo consciente de que tu vulnerabilidad es algo mortal.
Te permite hablar, más relajado e incluso prestarle más atención a la persona que quieres ayudar con tu servicio.
Empatía
Tener empatía no es decir lo que el otro quiere escuchar, es más sobre entender su punto de vista desde su propia perspectiva, no desde la tuya.
Y para eso necesitas escuchar, entender y sobre todo interpretar las frustraciones y necesidades humanas de tu cliente.
No pienses en empresas y cargos céntrate en las personas, recuerda que tu marca y lo que ofrezcas como solución no se trata de ti, se trata sobre la otra persona.
Honestidad
Ser honesto es más que una clave, hay sectores en los que incluso puede ser el distintivo de todo.
Cuando dejas de vender para ayudar, tu perspectiva cambia, hasta el punto de que puedes hablar sobre ventajas y desventajas, aciertos y errores.
Sobre lo que es y lo que no es tu servicio, en fin, puedes conectar como un ser un humano real, auténtico y mortal.
¿Qué puedes hacer ya?
- Lista los elementos de tu identidad que te dan inseguridad y abórdalos desde una óptica más arriesgada, menos perfecta
- Identifica los detalles más personales de tu cliente genial, si tienes una marca real y además eres empático será genial trabajar contigo
- Y por último, interioriza que la perfección aleja, ahora esto no implica que no seas un profesional de alto nivel, significa que seas un hombre real.
No se te olvide:
Sé más mortal e incorrecto ¡Lo bello es imperfecto!
Renzo D’Angelo
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